Protege tu piel
- A todos, o a la mayoría, nos gusta regresar de nuestras vacaciones veraniegas, y que los demás noten lo bronceados que volvemos, pero tomar el sol es una práctica altamente peligrosa. Os recomiendo tomar al sol con protectores solares adecuados a vuestra piel, optando por una pantalla total o factor 50+ para las pieles muy blancas y sensibles así como para los niños. Debéis buscar en el mercado solares que no contengan ni nano partículas, ni dióxido de titanio; es muy importante que en niños menores de 3 años utilicéis protectores con barreras físicas como el óxido de zinc, que no contengan sustancias químicas y cuanto más untuoso sea mejor. Lo que hace el óxido de zinc es una película protectora sobre nuestra piel, de manera que los rayos solares son reflejados y dispersados por la misma y de esta forma nos protege de la radiación UV. Este tipo de protectores hay que aplicarlos con antelación a la exposición solar, requieren de un tiempo para su eficacia. Para los que queréis solares completamente naturales, tenéis opciones como es el monoi de tahiti, pero, ojo, este aceite no puede ser aplicado en pieles muy blancas o para comenzar el bronceado. El monoi de tahiti se puede usar en personas con la piel morena o cuando ya estamos bronceados. Tomad el sol siempre con protección y cuidado con los niños.
- Os aconsejo tomar con antelación beta carotenos, seguro que muchos los conocéis. El beta caroteno es la provitamina A y nos prepara para tomar el sol, aumentando la producción de melanina de nuestra piel, evita que nos salgan manchas y pecas, nos bronceamos antes y nos dura más el bronceado. Sol sí, pero son precaución, de hecho el sol nos aporta vitamina D3, vitamina liposoluble que absorbemos principalmente a través de la piel y que interviene en multitud de procesos importantes en nuestro organismo.
- Aquellas personas que sois propensas a que os salgan manchas o pecas en la cara, podéis recurrir al uso de cremas faciales con factor de protección y que contengan baba de caracol, rica en alantoína , que ayuda a atenuar las manchas y las previene.
Ponte guapa sin perjudicar tu piel
- Nos ponemos al sol y las mujeres no abandonamos nuestra coquetería ni en bañador, nos pintamos las uñas, nos damos un poco de color en los labios….pero atención, seguro que muchas ya habéis oído hablar de lo tóxicos que resultan muchos de estos productos cosméticos. Pintalabios con plomo (cancerígeno), rímeles con nitrosaminas, pintauñas con ftalatos, formaldehidos y tolueno entre otros ingredientes. El plomo es un mineral altamente tóxico y calciotropo, se asocia al calcio de nuestros huesos acumulándose en nuestro organismo. Buscad cosméticos naturales, sin este tipo de compuestos químicos estaréis igual de guapas y vuestra salud os lo agradecerá :).
Hidrátate
- Estamos tanto tiempo al sol que no podemos olvidarnos de hidratarnos bien, hay que beber mucha agua y consumir muchas frutas. Las frutas de verano son muy ricas en agua y con muy pocas calorías, tengo que deciros que al contrario de lo que mucho pensáis la sandía y el melón son las frutas menos calóricas que hay, dado que tienen un alto contenido en agua.
Pon remedio a los excesos veraniegos
- Y si además de agua, nos pasamos con el alcohol, podemos poner en nuestra maleta un bote de vitamina B12 que nos ayudará a sobre llevar mejor la resaca. Tomar algún depurativo hepático también nos vendría bien, sus propiedades coleréticas y colagogas, nos ayudan a aumentar la producción biliar, mejorando así la digestión, el tránsito intestinal y de esta forma eliminamos a través del bolo fecal excesos de grasas y limpiamos nuestro eje hepato-biliar.
- El alcohol es altamente calórico, pero es que en verano es difícil resistirse al tinto de verano, a la cerveza bien fría o al rico tapeo español. Y sí, regresamos bronceados de nuestras vacaciones pero a lo mejor también con algunos kilitos de más. Para evitarlo, controlar la alimentación es fundamental y optar por tapas más ligeras y menos calóricas. Pero para los que la fuerza de voluntad la dejan en casa, os diré que existen productos ricos en fibras, como el chitosan, que no es más que un mucílago que actúa a modo de jabón aglutinando grasas y expulsándolas a través de la vía fecal evitando así su absorción.
- Por otro lado, hay productos como la faseolamina, una sustancia que inhibe la acción de la alfa amilasa, enzima que se encarga de la asimilación de hidratos de carbono complejos.
Descansa bien
- Y para los que decidís cruzar el charco, no olvidéis meter en vuestro equipaje un poquito de melatonina, hormona que regula el ciclo sueño-vigila y que os ayudará a sobre llevar mejor el jet lag.
¡Qué no te piquen!
- Si el destino es tropical, cuidado con los mosquitos, tu mejor aliada la citronela, en forma de roll on o como aceite esencial te ayuda a repeler a estos incómodos insectos que pueden convertir en un calvario un destino idílico. Deciros que la citronela también alivia los síntomas de la picadura si ésta se produjera, mejora la rojez, la inflamación de la zona y por supuesto el picor.
Cuida tu tripa...
- Quizás, el mayor problema que muchos encuentran en sus vacaciones, es ir al baño de forma adecuada. Salimos de nuestra rutina, de nuestro entorno, cambiamos los horarios y nuestro ritmo intestinal también lo acusa. No ir al baño, sensación de hinchazón, evacuado incompleto…son sólo algunos de los síntomas que tenemos cuando estamos de vacaciones. Para solucionarlos, lo más importante es cuidar la alimentación, beber suficiente agua, tomar alimentos ricos en fibra, pero repito bien hidratados, la fibra sin agua puede formar un fecaloma y empeoramos el problema. Consumir frutas ricas en fibra….y por supuesto tener siempre con nosotros algún complemento alimenticio rico en fibra y con alguna planta laxante como el ruibarbo o la cáscara sagrada.
- A veces el problemas es el contrario, comemos algo en mal estado o como consecuencia del exceso de calor tenemos una diarrea o descomposición; por eso siempre debemos llevar de vacaciones probióticos, o mejor dicho simbióticos (probióticos+prebióticos), son sustancias que nos ayudan a restablecer nuestra macrobiota, que en estas situaciones se ve alterada.
Con todos estos consejos, creo que será difícil que vuestras vacaciones se tuerzan, felices vacaciones a todos.
“Las vacaciones son como el amor: las anticipamos con placer, las experimentamos con incomodidad y las recordamos con nostalgia” Evan Esar