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   Publicado el 30/09/2022  | 
 
Alergía o intolerancia alimentaria- Síntomas y remedios
 
¿ALERGIA O INTOLERANCIA ALIMENTARIA? Cada vez es más común oír a alguien que padece algún tipo de intolerancia o alergia alimentaria.
 

¿Qué es una alergia alimentaria?


Es la reacción adversa del organismo ante la ingesta de determinados alimentos, aditivos y conservantes que provocan en el sistema inmunológico la formación de anticuerpos frente a proteínas de determinadas sustancias alimentarias.

Se pueden dividir en:

  • Tóxicas (cuando dependen exclusivamente de la sustancia y se producen en todos los individuos).
  • No tóxicas (cuando la reacción depende del individuo, y por tanto no aparecerá en todos los individuos).


La mayoría de las personas pueden comer una gran variedad de alimentos sin problemas. No obstante, en un pequeño porcentaje de la población hay determinados alimentos y componentes de alimentos que pueden causar reacciones adversas, que pueden ser desde pequeñas erupciones hasta reacciones alérgicas graves.
Las reacciones adversas a los alimentos pueden deberse a una alergia alimentaria o a una intolerancia alimentaria. Aunque una de cada tres personas cree ser alérgica a ciertos alimentos, la prevalencia real de la alergia alimentaria es tan sólo de un 2% en la población adulta. En la población infantil la incidencia es superior al 3-7%, aunque la mayoría superan las alergias alimentarias antes de la edad escolar.

La alergia alimentaria es una forma específica de intolerancia a un alimento o a uno de sus componentes que activa el sistema inmunológico. Un alérgeno (proteína del alimento causante, que en la mayoría de las personas no produce reacciones adversas) provoca una serie de reacciones en cadena en el sistema inmune, entre ellas la producción de anticuerpos. Estos anticuerpos generan la segregación de sustancias químicas como la histamina, que produce varios síntomas como picos, moqueo, tos o trastornos respiratorios. Frecuentemente, las alergias a los alimentos o a sus componentes se heredan y normalmente se identifican en los primeros años de vida.

 

¿Qué es una intolerancia alimentaria?


La intolerancia alimentaria afecta al metabolismo, pero no al sistema inmune del organismo. Un buen ejemplo es la intolerancia a la lactosa, que se da en ciertas personas por la carencia de una enzima digestiva llamada lactasa, que descompone el azúcar de la leche.

La intolerancia se produce cuando el organismo no es capaz de procesar o digerir un compuesto de los alimentos, lo que puede causar problemas digestivos, náuseas, vómitos, inflamación, dolor abdominal, retortijones y episodios de diarrea. Una intolerancia alimentaria también puede estar detrás de problemas dermatológicos, como acné; neurológicos, como dolor de cabeza o migraña, o endocrinos, impidiendo la pérdida o control del peso. Aunque la intolerancia puede ser molesta y tener un impacto negativo en la calidad de vida del individuo, no es tan peligrosa o grave como una alergia.

 

¿Cómo puedo diferenciarlas?


Las diferencias entre las alergias y las intolerancias, están en sus síntomas.

  • En el caso de las alergias...

Se produce una reacción inmediata y, una vez identificada la causa, basta con evitar el alimento para prevenir cualquier episodio alérgico.
Aun así, pueden aparecer reacciones alérgicas cruzadas por contaminación, es decir, porque comemos algo que ha estado en contacto con el alimento que nos causa la alergia.

  • En el caso de las intolerancias...

Los síntomas aparecen un tiempo después de comer y existe la posibilidad de que desaparezca con los años o reeducar al organismo para que pueda aceptar poco a poco el alimento que causa el problema.

 

Algunas de las alergias más comunes:

 

  • Alergia a la leche: suele ocurrir durante la infancia (en los primeros meses de vida), y en muchos casos desaparece a los pocos años de vida. La única solución es sustituir la leche y sus derivados por otros productos que no sean de origen animal, como las bebidas vegetales de soja, arroz, avena, almendra…

  • Alergia al huevo: también suele ocurrir en la infancia, en muchas ocasiones desaparece entre el primer y segundo año de vida y alrededor del 70% de los niños acaba superándola. En los adultos, es más extraño que ocurra. El tratamiento consiste en mantener una dieta completamente exenta de huevo, teniendo especial cuidado con todos los alimentos que lo contienen, como repostería, pastas, salsas, cosméticos…

  • Alergia al marisco y al pescado: es una alergia bastante frecuente, sobre todo al marisco, siendo más común en adultos que en niños. En el caso del pescado, la mayoría de las alergias suele ser al pescado blanco y puede durar toda la vida.

  • Alergia a frutos secos, legumbres y cereales: legumbres como la soja, las lentejas, los guisantes o los garbanzos, así como los frutos secos, tales como el cacahuete, son los alimentos a los que se deben, normalmente, este tipo de alergias. En cuanto a los cereales, la prevalencia a esta alergia es bastante baja y suele desaparecer con la edad. La recomendación principal es estar muy pendiente del etiquetado de los productos. Existen trazas de frutos de cáscara en muchos alimentos, pero debe estar correctamente etiquetado.

  • Alergia a verduras y frutas: es la causa más común de reacciones alérgicas en niños de más de 5 años y en adultos. La fruta más común a producir reacción alérgica, es el melocotón. En cuanto a las verduras, las más alérgicas con las hortalizas (lechuga, tomate, zanahoria…).

 

Algunas de las intolerancias más comunes:

 

  • Intolerancia al gluten: el gluten es una glicoproteína presente en cereales como el trigo, el centeno, la cebada y la avena. Los celiacos cuando ingieren gluten se produce una reacción inflamatoria en su intestino que provoca pérdida de peso, vómitos, fatiga, dolor abdominal…

  • Intolerancia a la lactosa: la lactosa es un azúcar que está presente en cualquier leche de mamífero (vaca, cabra, oveja). Las personas que son intolerantes a la lactosa no poseen suficiente enzima lactasa en el intestino delgado para digerir toda la lactosa consumida por lo que pasa al intestino grueso y provoca dolores, hinchazón abdominal…

  • Intolerancia a la histamina: es una sustancia que fabrica nuestro cuerpo, aunque también se encuentra presente en alimentos como el queso, el vino o las verduras. Se da en personas cuyas enzimas no son capaces de absorber y degradar la histamina que se acumula en el cuerpo. Esto puede provocar problemas gástricos, dolor de cabeza, migrañas…

 

Una vez detectada cualquier intolerancia o alergia alimentaria es muy importante un buen tratamiento, es decir, que se mantenga una dieta sana y equilibrada, eliminando estos alimentos especialmente durante el crecimiento y desarrollo de los niños y sustituirlos por otro que nos aporten los mismos beneficios.

 

Desde Herbolario Dharma les ofrecemos algunos complementos alimenticios que les pueden ayudar a reducir la sintomatología de estos procesos, aportando un extra de enzimas a nuestro organismo para facilitar la digestión de estos alimentos:


De igual modo sería interesante la toma de algún probiótico
que ayude a reestablecer la macrobiota que en estas patologías se ve alterada de forma irremediable:
 

 

Espero que sirva de ayuda este blog para todos aquellos que padecen algún tipo de alergia o intolerancia alimentaria, cada día más frecuentes. Como siempre estaremos encantados de atenderos en cualquiera de nuestros centros de Salamanca y de Santa Marta, así como también en nuestra tienda on line.

 

“Nuestra comida debería ser nuestra medicina y nuestra medicina debería ser nuestra comida” Hipócrates

 


 

 
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